No tengo tiempo dereflexionarsobrelo que voy a decir ni tampocode separarlas palabras de estepost de urgencia escritoen un cyber de la otrapunta delmundo. He quedadoconmigo y llegotarde. Cinco minutitos y me voy.
Carrera11con lacalle 82.Nohe podidodesayunar, Rubimevieneabuscar para ir alMuseoNacional. D.también meesperará en quince minutitosparasentarnos en unbancoal sol y comerse una manzana. Yotengo hambre. También he quedadoconmigo,como he dicho.Veré si llegoatiempo. Si no,me llamaré alcelular. Ayercompré una tarjeta de 20.000.
Estos días me estoy encontrandoa mí mismo,a veces porcasualidad y otrasa conciencia,porque me busco, me quiero encontrar y lohago.
Debe deser elclima fresquito, lacalma,lapazque se respira y se camina en eladoquinado demis dos yos.
Me llama D.paraque nomeapure, Rubi sedemora(qué raro) y tengoun ratitomás. Loaprovecharé para desayunar,que aunque misyos sean dos,elhambre es total.
enero 28, 2007 en 2:04 pm
Este es muy divertido y también muy poético.
El hecho de juntar las palabras ¿es por algo parecido a esa aceleración que se siente,cuando piensas que no llegas a tiempo? Se te escapa el tren, tu cabeza va a mil por hora y no puedes hacer nada, porque tu cuerpo no puede hacer lo que tu desearías.
Sonia
En ese momento tu yo está repartido, una parte en el táxi, camino de la estación y la otra mirando el reloj ,en la puerta de casa.